El ingeniero agrónomo Marcelo Arriola, ensayó mucho durante los últimos años en la Chacra Pergamino Aapresid, donde puso en práctica múltiples variantes al esquema agrícola convencional aplicado en el país.
En base a su conocimiento obtenido en la Chacra 1, es consciente de la degradación que sufrieron muchos suelos. Por lo tanto cree que la adopción de un “sistema constantemente vivo” es la alternativa que muchos productores van a imitar.
“Podemos condicionar la salud del suelo en la Argentina adoptando el sistema Siempre Verde que Aapresid nos desafía. Su objetivo es tener las mayores capturas de carbono y mejorar el suelo paulatinamente”, explicó Arriola.
Para ello, cree que la vicia es un cultivo superador, debido principalmente a los servicios que brinda al lote, pero por sobre todo al sistema agrícola.

Vicia, al servicio del sistema
Para Arriola, son muchos los servicios que la vicia le brinda al sistema. Pero fundamentalmente al cultivo de maíz, según los datos recabados en la Chacra Pergamino, durante más de ocho años de investigación.
“Le agrega nitrógeno al cultivo de maíz, e indirectamente aporta carbono al sistema agrícola”, enumera como dos cualidades fundamentales del servicio que ofrece.
Además, sostienen que cuando se piensa en maíces tardíos, sembrarlo arriba de vicia, en muchos casos, obtiene un rendimiento mayor que sembrarlo sobre un rastrojo.

Por otra parte, habló de la importancia de la vicia en relación al control de malezas. “Debemos entender que en épocas de barbecho usamos una cantidad enorme de agroquímicos que podríamos evitar con la siembra de vicia”, se anima a confesar Arriola.
El impacto sobre la maleza
Ocurre que cuando se siembra una vicia en lugar de hacer un barbecho, el control de malezas es otro servicio que brinda este cultivo de cobertura. “Nos entrega un lote muy limpio. Casi que podríamos decir que implantamos la vicia y nos olvidamos. Aunque siempre debemos monitorear”, dice el especialista, oriundo de la ciudad bonaerense de Pergamino.

Además, sostiene que existen datos, donde los productores que implantaron vicia se ahorraron el pre-emergente en maíz. “La gran cobertura que genera la vicia, si uno logra rolarla y homogenizarla, produce un gran colchón que juega fuertemente sobre la emergencia de malezas”, dice convencido.
“La evaporación es el principal factor de pérdida de agua. Es preferible gastar un poco de agua en el invierno con un cultivo de servicio (p.e. vicia como cobertura) para sellar el suelo y bajar esa pérdida. Tenemos que dejar de asociar los cultivos de servicio como pérdida de agua”
En ese sentido, aseguró que los bancos de semillas de malezas bajan considerablemente cuando se siembra vicia como cobertura. “Podemos soñar hacer un maíz sin agroquímicos”, sostiene el ingeniero.
“Tenemos que dejar de anualizar el éxito”
Para Arriola esto es clave. “Gran parte del secreto es salir de la anualización”, manifiesta sin dudarlo. En ese sentido, los técnicos tienen un desafío enorme que es tratar de ayudar al productor agropecuario para que de manera progresiva salga del sistema anualizado.
“Indudablemente el sistema siempre verde no siempre da resultados inmediatos. El productor debe cambiar la cabeza en este aspecto y comenzar a ver más allá de la campaña”, dice el entrevistado.
A modo de ejemplo, sostiene que cuando un productor ingresa a un cultivo de servicio en un año seco, indudablemente este le va a consumir agua. “Esto puede provocar una merma en el rendimiento del cultivo siguiente, sin dudas. Pero debe comprender que este proceso que inició le va a capturar carbono, aumentará la eficiencia de uso de agua y hasta prevenir nacimientos futuros de malezas en los años siguientes“, confirmó.

En ese sentido, Arriola comentó que la mayor parte de la pérdida de agua en el sistema convencional se va por evaporación. “El cultivo de cobertura le cambia la fisonomía al suelo y no permite que el agua se evapore fácilmente”, menciona el técnico como una de las bondades para comenzar a cambiar la cabeza.