Un estudio de la BCR destacó que la reposición de hacienda bovina será el rubro más costoso, seguida por los gastos directos e indirectos.
Un informe elaborado por la Bolsa de Comercio de Rosario asegura que el sector de la ganadería bovina desembolsará un total estimado de 20.322 millones de dólares entre gastos e inversiones para el mantenimiento operativo su estructura productiva, comercial y de inversión.
El stock bovino, que inició el año con 51,6 millones de cabezas, constituye el punto de partida del análisis, que se basó en información de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, de la revista Márgenes Agropecuarios y estimaciones propias de la BCR.
La dimensión y la composición del rodeo determinan en gran medida la magnitud de los desembolsos necesarios para atravesar el ciclo productivo y sostener la oferta de carne. Sobre esta base, el modelo identifica cinco grandes rubros de gasto:
Gastos directos: Totalizarán en 2025 unos US$ 4.117 millones. Dentro de esta categoría, el costo de alimentación se destaca como el principal destino, representando el 73% del total. Esto equivale a 1.926 mill/dol en suplementación y 1.060 mill/dol en pasturas y verdeos. A ello se suman gastos de personal por US$ 688 millones y desembolsos en sanidad por 443 mill/dol.
Gastos de comercialización: Alcanzarán 755 mill/dol, correspondiendo el 62,4% de esa suma a comisiones de mercado, remates y ventas directas, mientras que el 37,6% restante se atribuye al transporte de animales, tanto entre establecimientos como hacia plantas de faena.
Gastos indirectos: Se estiman en 4.475 mill/dol, correspondiendo 2.827 mill/dol a personal de estructura, asesoramiento técnico y contable, energía, mantenimiento y otros gastos operativos. Los arrendamientos y pasturas representan 1.397 mill/dol, actualizados en función de la evolución del precio del novillo. Finalmente, el financiamiento completa este rubro con 251 mill/dol.
Inversiones en bienes durables: Absorberá 1.021 mill/dol en 2025, monto en el cual se incluye la reposición y adquisición de maquinaria, infraestructura, equipamiento y vehículos (entre ellos pickups) necesarios para sostener y modernizar el funcionamiento de los establecimientos ganaderos.
Reposición de hacienda: para 2025, se proyecta que este componente demandará 9.954 mill/dol. Allí se computa tanto la reposición de terneros para la invernada y los sistemas de engorde, como la reposición de vientres, estimada en un 20% anual sobre el stock total de vacas.
“La ganadería bovina constituye uno de los pilares históricos de la economía argentina, jugando un rol de gran importancia en el valor agregado del país, y en la movilización de recursos para sostener la producción, el consumo y las exportaciones”, expresaron los autores del trabajo Franco Ramseyer, Emilce Terré y Julio Calzada.
En el trabajo se recuerdó también que Argentina produce anualmente más de 3.000.000 de toneladas de carne vacuna, es el principal consumidor de carne por habitante y, en el frente externo, es el 5to exportador del mundo. En 2024, el complejo carne y cuero bovinos fue el 6t0 complejo exportador de Argentina. “Sostener esta vasta capacidad productiva requiere un esfuerzo de recursos constante y significativo”.



