En el equipamiento de las pulverizadoras autopropulsadas, los botalones cada vez se ponen más anchos en el mercado argentino. La demanda ya sobrepasó el umbral de los 30 metros y se va concentrando en las versiones de 36 metros, e incluso se alarga a los 42 metros.
El piso de 25 metros queda definitivamente atrás y esto explica las opciones que las empresas incorporan en los botalones.
La cuestión de tamaño prescinde del tipo de material con que se fabricó el botalón, más allá de las variantes que hoy existen en Argentina.
“El material no es el tema de elección en barrales. Nadie elige el ancho de labor por el material, lo que importa es el ancho”, explica el gerente comercial de una fábrica líder en pulverizadoras.
Por supuesto, si se puede combinar más ancho con menor peso de las alas, la ecuación cierra, pero no es el factor determinante.
Capacidad
El corrimiento del mercado hacia los botalones más extensos se fundamenta en la búsqueda de mayor autonomía de trabajo.
La consigna es aprovechar al máximo las ventanas de trabajo y los momentos más propicios para hacer aplicaciones.
“Los productores y contratistas prefieren resignar algo de velocidad, pero cubrir más superficie en cada pasada”, señalan desde una fábrica cordobesa de pulverizadoras.
También el ancho de labor se apoya en los crecientes volúmenes que entregan los tanques, con capacidades que promedian los 4.000 litros.
Variantes
Las longitudes en barrales que hoy ofrecen las empresas en Argentina son:
- Caimán: 28, 32, 34, 36, 40 y 44 metros.
- Case IH: 30 y 36 metros en la línea Patriot.
- Favot: 28 y 32 metros.
- Golondrín: 25, 28 y 32 metros.
- Jacto: 36 y 42 metros.
- John Deere: 27, 30, 36 y 40 metros.
- Kuhn: 30, 32, 36 y 40 metros.
- Massey Ferguson: 28 y 32 metros.
- Metalfor: 32 y 41 metros.
- New Holland: 27 y 36 metros.
- Ombú: 26, 30, 32 y 36 metros.
- Pla: 32 metros.
- Praba: 32 y 40 metros.
- Pulqui: 25 y 30 metros.
- Releyco: 30, 32, 36 y 40 metros.
- Stara: 30, 36 y 40 metros.
- Tedeschi: 25, 27, 28 y 34 metros.
- Valtra: 25, 28 y 32 metros.
