Chicharrita suma riesgos a la cosecha de maíz de Argentina

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En abril, la Bolsa de Cereales de Rosario revisó a la baja sus estimaciones de producción de maíz en Argentina, reduciéndolas en 6,5M mt. La Bolsa de Granos de Buenos Aires (Bolsa de Cereales) este mes llevó a cabo dos recortes en sus estimaciones, que ascendieron a una reducción de 4,5M mt.

A pesar de los importantes recortes, todavía hay margen para un mayor deterioro de las estimaciones. Algunos players locales ya hablan de pérdidas de alrededor de 10M mt con respecto a las estimaciones iniciales de las bolsas locales, lo que podría llevar la producción total a niveles por debajo de los 45M mt.

En resumen, América del Sur debe seguir brindando apoyo al maíz Chicago, ya que tanto la cosecha de invierno argentina como la brasileña siguen en desarrollo y es necesario monitorearlas.

Tras un ciclo marcado por expectativas de recuperación de la producción de maíz en Argentina, el mes de abril trajo preocupaciones relevantes respecto a la producción del país debido a una plaga muy conocida entre los productores brasileños – la Chicharrita. “En este informe plantearemos cuál puede ser el impacto total en la cosecha y las repercusiones para el mercado mundial de maíz”, dice Alef Dias, analista de Granos y Macroeconomía de Hedgepoint Global Markets.

Reducción de hasta 10M mt
Durante abril, la Bolsa de Cereales de Rosario revisó a la baja sus estimaciones de producción de maíz en Argentina, reduciéndolas en 6,5M mt. Esta revisión se debe principalmente a los daños causados por las enfermedades transmitidas por la chicharrita. La Bolsa de Granos de Buenos Aires (Bolsa de Cereales) este mes llevó a cabo dos recortes de sus estimaciones, que ascendieron a una reducción de 4,5M mt.

“A pesar de los importantes recortes, todavía hay margen para un mayor deterioro de las estimaciones. La cosecha solo llega al 19,8% de la superficie, y el último informe de progreso de la cosecha de la Bolsa de Cereales presentó una caída adicional en el porcentaje de las buenas y excelentes condiciones de cosecha por debajo del 60%. Algunos players locales ya hablan de pérdidas de alrededor de 10M mt con respecto a las estimaciones iniciales de las bolsas locales, lo que podría llevar la producción total a niveles por debajo de los de 45M mt”, subraya el analista.

Pero ¿por qué el impacto fue tan severo?

“En la cosecha actual, hubo un aumento en la incidencia de chicharritas en algunas regiones de Brasil, especialmente en el sur del país. Este fenómeno contribuye a explicar la situación de infestación observada en Argentina y Paraguay. El clima también contribuyó al aumento de la plaga. La chicharrita es un insecto cuya proliferación está estrechamente vinculada a las condiciones climáticas. Debido a las temperaturas no tan bajas en invierno y la alta humedad relativa del aire, la población de este insecto tiende a aumentar, ya que estos factores favorecen su dinámica poblacional”, explica.

Según Alef, además del aumento del número de insectos en el país, otro factor que ha contribuido en gran medida a este problema fue que la chicharrita apareció en regiones donde no era común, tomando de sorpresa a los productores locales.

Con la incertidumbre sobre la cantidad total de maíz a cosechar, se puede esperar una desaceleración en las ventas de los productores argentinos, por lo que el ritmo – que aún está cerca de los niveles más bajos de los últimos cinco años – se encuentra amenazado.

“Y la demanda de maíz argentino también debe contribuir a este escenario de menor participación del país en el comercio mundial, dado que los precios locales ya se vieron fuertemente impactados por la “plaga”, con los basis en Argentina alcanzando los niveles más altos de los últimos cinco años. Y la expectativa de recortes adicionales en la producción debe mantenerlos bajo presión durante los próximos meses”, opina.

El aspecto macroeconómico puede cambiar un poco este escenario, pero el “spread” entre el tipo de cambio paralelo y el oficial no ha variado mucho en las últimas semanas, y hoy es mucho más bajo que a fines del año pasado, por lo que el impulso de una nueva devaluación tiende a tener menos impacto.

Según el analista, las repercusiones de este problema también se pueden extender a la próxima cosecha, que comenzará a sembrarse en Argentina entre agosto y septiembre de este año. Los productores argentinos pueden optar por reducir la superficie plantada, dado que no existe ninguna solución tecnológica eficaz para combatir las chicharritas.

En resumen, América del Sur debe seguir brindando apoyo al maíz Chicago, ya que tanto la cosecha de invierno argentina como la brasileña siguen en desarrollo y es necesario monitorearlas.