El trigo atraviesa un momento complejo, ya que superó el frío y afronta la falta de agua. A pesar de este escenario, el 60 % de la superficie de la zona núcleo es muy bueno y el 40 % bueno.
Este dato es importante en un contexto en el que el cultivo frenó su crecimiento por el frío. Además, se suma la espera de 15 milímetros que pueden darle un empujón importante al cultivo.
Trigo
Las temperaturas de la última semana fueron muy bajas y la media fue de 4,8 °C para la zona de Rosario. En Marcos Juárez, los técnicos midieron – 11 ºC a 5 centímetros del suelo.
“Del 1 al 14 de julio, en ocho localidades de la red de estaciones meteorológicas hubo temperaturas mínimas que descendieron incluso por debajo de los -7°C”, informó la BCR.
El frío generó que el cultivo frene su desarrollo. También se dieron algunos casos de muerte de plántulas en recientes camadas de siembra, pero no hay daños significativos por el frío.
“La humedad presente en niveles subsuperficiales del suelo fue clave para contener el daño. En el sur santafecino, en Fuentes, hay daños en hojas del cultivo: aunque el cultivo muestra un color no habitual, se espera una recuperación gracias a la humedad presente en el perfil», contó el informe.
Los técnicos esperan que lleguen las lluvias para el fin de semana. Estas precipitaciones permitirán la fertilización.
Por su parte, en el norte bonaerense y en el sudeste cordobés también se observan signos de quemaduras en las hojas, pero hay confianza en la recuperación del trigo con la llegada de lluvias en el corto plazo. “Actualmente, el 30 % del cultivo está en etapa de macollaje, el 4 0% en fase de foliación y un 30 % aún emergiendo”, comentó el informe.
Las probabilidades de lluvias están, pero resta conocer cómo será el desarrollo de las mismas. El consultor de la BCR, Alfredo Elorriaga, indicó que las precipitaciones se darían tras un aumento de la actividad atmosférica.